Estas navidades tuve la suerte de realizar un pequeño viaje a Roma durante el inicio del presente año. Para la celebración del año nuevo la ciudad estaba bastante concurrida, factor con el que contaba pero no hasta tal extremo.
Roma es una ciudad increíblemente bella en muchos aspectos e incomprensiblemente horrible en otros. Cuesta asimilar que un lugar que alberga tal patrimonio humano pueda ser tan sucio, dejado, abandonado, parco en explicaciones y mal estructurado. La red de buses de Roma es sumamente complicada y el metro no cubre demasiado territorio. Que el metro no sea más extenso se entiende, ya que perforar bajo tierra en Roma debe ser una odisea debido al agua y el constante descubrimiento de ruinas. Que el metro esté destartalado, con una frecuencia de paso bajísima, sucio, mal indicado, con problemas para comprar tickets... eso ya no se entiende. Para los que necesitamos del orden, Roma no es precisamente una ciudad ideal.
Llegamos a Roma cuando ya había oscurecido. Las primeras impresiones, entre la suciedad, caos, gentío y oscuridad general de la "città eterna" fueron francamente decepcionantes. Tampoco ayudó lo soso de la celebración del fin de año allí. Afortunadamente todo lo anterior cambio el día siguiente.
Primera vista del Coliseo (1 de enero 2013) |
Tras una larga ruta a pie por toda la ciudad llegamos a la Roma antigua. Esta zona me gustó mucho, ya que tras el cansancio y leve decepción de la primera noche, un cielo gris le dio una atmósfera preciosa al momento. Divisar por primera vez el Coliseo, a medida que caminábamos por la Via del Foro Imperial fue un instante especial. Ayudó mucho el día festivo, que despejó de gente toda la zona y permitía moverse con soltura y observar desde lo alto toda el área de ruinas.
Coliseo visto desde el Palatino |
Volvimos a la zona al día siguiente, por la mañana con más luz y muy a mi pesar, con muchísima más gente. Hicimos una aceptable cola para visitar el interior del Palatino y el Foro. Sorprende por dos cosas: lo caro que es y la falta de carteles explicativos. Realmente sin una audio-guía o un guía es imposible informarse de NADA de cuanto se ve. Una vergüenza y un atentado a la cultura y al bolsillo del turista. El Foro es muy bonito y se respira una sensación especial al observar tal abrumadora cantidad de reliquias pétreas tan bien conservadas; sobre todo los arcos, algunos de ellos están francamente casi perfectos.
Maravilloso ambiente y sensación que se respiran dentro del Foro |
Me llamó la atención el basto e inmenso Monumento a Vittorio Emanuelle II que hay cerca de la zona. Es realmente descomunal y llama la atención por lo resplandeciente de su blanco. También resulta curioso que intentar cruzar la calle por esa zona requiera de bastante valor. Y también requiere bastante de lo anterior el hecho de tener que pagar 5€ por dos cortados (bueno, dedales de café, muy buenos pero bastante escasos en cuanto a cantidad).
Monumento a Vittorio Emanuelle II |
El último día hicimos un gran recorrido que nos gustó y sorprendió gratamente. La zona de la Piazza Navona es bastante más limpia, tranquila y luminosa que el resto de la ciudad. Hay una inmensa cantidad de iglesias por este área, callejuelas con comercios curiosos y bastante alegría, especialmente en la misma Piazza.
Vista del Tiber desde el Puente de Vittorio Emanuelle II |
Es de agradecer que tras mucho caminar para encontrar el escondido Panteón no te cobren nada por entrar. Es un lugar especial, cerca de la anterior zona descrita. Llama la atención por la combinación de elementos que se pueden encontrar allí. Tumbas de reyes, una entrada muy antigua, la cúpula con su tragaluz...
M·AGRIPPA·L·F·COS·TERTIVM·FECIT |
Respecto al tragaluz del interior, uno puede pensar que estña acristalado; nada más lejos de la realidad. El día anterior llovió por la noche y cuando visitamos el Panteón el suelo estaba mojado. De hecho, el precioso y brillante suelo tiene cierta forma cónica en el centro para evacuar mejor el agua.
Interior del Panteón |
La siguiente foto no está realizada mediante Instagram. Descubrí una nueva app que permite aplicar filtros que simulan dibujos a pincel, acuarela, blancos y negros, etc. La app en cuestión es SketchGuru y es 100% recomendable.
La foto en cuestión está tomada cerca de la Piazza Navona. Tras una pequeña puerta de madera abierta se podía divisar un bello y verde jardín con el edificio que se ve de fondo. Resultaba apabullante la tranquilidad y silencio que allí había. No había demasiadas indicaciones, pero creí entender que era un archivo.
Lugar desconocido nº..... |
Finalizó así este compendio de fotos de mi breve pero intenso periplo por Roma. Me quedó muchísimo por ver y mucho que visitar. La siguiente visita (que la habrá) espero que sea con guía. Si ese guía lee esto, que se dé por aludido.
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